Tenemos que darnos prisa porque, la temporada óptima de atún rojo toca a su fin. Durante los meses de mayo a octubre podemos degustar los mejores ejemplares de este pescado en el mercado. Por eso, hemos querido aprovechar para elaborar una deliciosa receta mediterránea: albóndigas de atún con salsa de tomate. Pero antes, vamos a conocer algo más de este pescado.
El atún es un pescado azul que pertenece a la familia de los escómbridos y vive en aguas del Atlántico, del Mar Negro y en las profundidades del Mar Mediterráneo. Puede llegar a medir hasta 4 metros y pesar más de 500 kg, aunque las tallas medias se sitúan en torno al metro de longitud y los 6 kg de peso. Su carne es muy valorada en gastronomía por su sabor y textura.
Es un pescado muy rico en vitamina B3 o niacina, muy beneficiosa para el sistema circulatorio. Además, participa en el funcionamiento del sistema nervioso y en el buen estado de la piel. También contiene una gran cantidad de yodo, bueno para el metabolismo, ya que regula el nivel de energía y el correcto funcionamiento de las células, así como fósforo, magnesio y hierro. Y, como buen pescado azul, es rico en ácidos grasos omega-3, que ayudan a reducir los niveles de colesterol y de triglicéridos en sangre. Solo tienen que moderar su consumo aquellas personas con problemas de hiperucemia o gota, por su contenido en purinas (que, en el organismo, se transforman en ácido úrico).
Ahora que conocemos un poco más este pescado, nos ponemos manos a la obra con la receta. Aunque estamos acostumbrados a comer albóndigas elaboradas con carne, esta vez os vamos a proponer una variación con atún. ¡Esperamos que os guste!
Albóndigas de atún rojo en salsa de tomate
Ingredientes:
• 500 g de atún rojo (podéis comprarlo en www.lamardefresco.es)
• 500 g de tomates maduros
• 1 cebolla roja
• 250 g de champiñones
• 3 dientes de ajo
• Pan rallado o harina
• Queso Parmiggiano (o similar)
• 2 huevos
• Orégano
• Perejil
• Sal
• Pimienta
• 1 limón
• Aceite de oliva
• Vinagre balsámico o de Jerez
Elaboración:
En primer lugar, se trocea el atún en dados muy pequeños y se saltea en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que pierda el color rojo característico de cuando está crudo. Se retira el atún y se deja enfriar un poco para poder trabajarlo con las manos.
Una vez se ha templado, se echa en un bol y se añaden dos cucharadas de orégano, perejil fresco picado (al gusto), el queso, la ralladura y el zumo del limón y dos huevos y se mezcla todo. Se va añadiendo pan rallado o harina (lo que os guste más) y se trabaja la mezcla, machacándola con los dedos, hasta que se haga una masa con suficiente consistencia como para elaborar las albóndigas, que serán del tamaño de una pelota de golf o un poco más pequeñas. Se unta una bandeja con aceite de oliva y se ponen en ella las albóndigas, introduciéndolas en el frigorífico durante una hora para que terminen de adquirir consistencia.
Mientras tanto, elaboramos la salsa. Para ello, picamos la cebolla y el ajo en trozos pequeños y los sofreímos a fuego bajo/medio durante unos 10 minutos. Cuando falten unos 4 minutos, añadimos los champiñones troceados. Pelamos y cortamos en dados los tomates y los añadimos al sofrito. Salpimentamos y añadimos otra cucharada de orégano y un chorrito de vinagre de Módena o de Jerez, y dejamos que hierva todo durante 15 minutos.
Una vez trascurrida una hora, podemos freir las albóndigas en una sartén con un poco de aceite (no demasiado, recordemos que el atún ya está cocinado). Una vez que estén doradas se añaden a la salsa. A la hora de servir, se espolvorean con un poco de perejil picado por encima. Se pueden acompañar con un poco de arroz o pueden ser el complemento ideal para un plato de pasta.
¡Disfrutadlas! Y recordad que podéis hacer vuestro pedido online de pescado fresco en www.lamardefresco.es y os lo llevaremos hasta vuestro domicilio.